Santo Domingo Oeste.- En un ambiente de hermandad y familia los residentes
del Callejón X del sector Enriquillo de Herrera, Santo Domingo Oeste, celebraron
la noche de este jueves 12 de diciembre una cena navideña con la intención de llevar
un mensaje de alegría y esperanza a la comunidad.
Con palabras bíblicas,
entretenimientos para los niños, espacios para discapacitados, todos a una para
compartir un día especial en esta zona, es la forma en cómo sus habitantes
pasaron está noche.
Yeimi Cabrera, joven comunitaria
del sector, en conjunto con otros residentes del Callejón X, lograron según
cuentan a este medio, “poner a las personas que viven aquí en un ambiente de
hermandad y confraternidad”.
“Esto ha sido un trabajo de la
comunidad, con gente buena y trabajadora, antes veíamos jóvenes ensangrentados
tirados en la acera, tiros por doquier, policías se llevaban a nuestros
jóvenes, hoy vemos jóvenes buscando aliento de vida, preparándose para el
mañana”, destacó Yeimi con una agradable sonrisa de felicidad al momento de
comparar lo que era el Callejón X hace unos años atrás, a lo que es hoy en día.
“No tengo palabras para describir
el gran apoyo recibido por el alcalde Francis Peña, la subdirectora de Obras
del Estado, gracias a ellos por decir que si a esta hermosa actividad”, dijo.
Así mismo, señaló que a esta
iniciativa se sumaron tanto perredeistas, peledeistas, evangélicos, católicos,
estudiantes, sin bandería alguna, convertidos en uno solo por el bienestar de
todos, “esto es un regalo grande que Dios ha hecho por esta comunidad”.
A la actividad comunitaria se
dieron cita más de 200 personas, todas residentes en este extenso callejón, las
cuales pudieron disfrutar del famoso pollo horneado y cerdo asao, ensalada
rusa, telera, manzanas, uvas, todo lo que una cena navideña puede tener.
Opinan residentes del Callejón X
La felicidad en los residentes de
este lugar era visible en cada rostro de los presentes, tanto así que no había
espacio para la tristeza ni el pensar en que pudiera volver a ser un lugar
violento como era catalogado en tiempos anteriores.
Elida Martínez, lugareña del
Callejón dijo que “esta actividad es muy buena y nos ayuda a sentirnos entre
familia, Dios ha hecho un cambio especial en este lugar”.
De su lado, Ercilia Beltre
aseguró que “ahora este es un callejón más confiable y con mayor tranquilidad”.
Por Joel Suero
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