Haití.- La epidemia de cólera en Haití puede agravarse este año si no se consiguen los recursos necesarios y su expansión a América Latina es una espada de Damocles sobre la región, advirtió en una entrevista a la AFP el coordinador de Naciones Unidas para la respuesta contra el cólera, el chileno Pedro Medrano.
Medrano indicó además que la necesidad de resolver la crisis humanitaria en Haití no tiene "nada que ver" con la demanda judicial de la cual es objeto la ONU en Nueva York por su supuesta responsabilidad en el brote de la enfermedad en octubre de 2010, del que se acusa a cascos azules nepaleses enviados tras el terrible terremoto de principios de ese año.
Desde entonces, más de 8.330 personas murieron y unas 680.000 se contagiaron de cólera en Haití, que aún está lejos de haber controlado la epidemia, ya que en 2013 registró 65.000 casos y 55 muertos, además de trasladarse a países vecinos como República Dominicana, Cuba y, más recientemente, México.
Según Medrano, un diplomático chileno de amplia experiencia nombrado en el cargo hace cuatro meses por el secretario general de la ONU Ban ki-moon, la situación podría empeorar este año si no consiguen los fondos para mantener los centros de tratamiento de cólera abiertos y mejorar poco a poco el acceso al agua potable e instalaciones sanitarias para la población haitiana.
"Lo que tenemos es un gran desafío. Si no estamos preparados para hacer las inversiones necesarias ahora, este año tendremos quizás 180.000 ó 160.000 casos y hasta 2.000 muertos", señaló con preocupación en las oficinas de la ONU en Nueva York.
Medrano admitió que la ONU y la comunidad internacional "desafortunadamente estuvieron muy poco enfocados en la respuesta" contra el cólera hasta ahora, y dijo que "éste no es solo un problema para Haití o la isla La Española, sino también para el resto y del mundo".
"En el pasado, en los 90, en América Latina tuvimos cólera. Empezó con un caso en un puerto en Perú y se expandió por toda la región: 18 países fueron afectados, un millón de personas infectadas y 10.000 muertos. Es algo que no queremos volver a tener", recordó.
"La región debe entender que es inaceptable tener este nivel de casos, que puede tener consecuencias devastadoras en el futuro en términos de salud, turismo, comercio", continuó.
"Esto no tiene nada que ver con el caso legal"
Medrano rechazó la visión de que el esfuerzo de la ONU por ocuparse de la epidemia es una suerte de "compensación" por su presunta responsabilidad en el brote, algo que a su entender no está probado.
"Para nosotros, como en muchas otras situaciones, nuestro papel es estar ahí. Esto no tiene nada que ver con el caso legal. Tenemos una crisis humanitaria de la que debemos ocuparnos. Ya tendremos tiempo para discutir las causas y aprender de esto", sostuvo.
Medrano indicó además que la necesidad de resolver la crisis humanitaria en Haití no tiene "nada que ver" con la demanda judicial de la cual es objeto la ONU en Nueva York por su supuesta responsabilidad en el brote de la enfermedad en octubre de 2010, del que se acusa a cascos azules nepaleses enviados tras el terrible terremoto de principios de ese año.
Desde entonces, más de 8.330 personas murieron y unas 680.000 se contagiaron de cólera en Haití, que aún está lejos de haber controlado la epidemia, ya que en 2013 registró 65.000 casos y 55 muertos, además de trasladarse a países vecinos como República Dominicana, Cuba y, más recientemente, México.
Según Medrano, un diplomático chileno de amplia experiencia nombrado en el cargo hace cuatro meses por el secretario general de la ONU Ban ki-moon, la situación podría empeorar este año si no consiguen los fondos para mantener los centros de tratamiento de cólera abiertos y mejorar poco a poco el acceso al agua potable e instalaciones sanitarias para la población haitiana.
"Lo que tenemos es un gran desafío. Si no estamos preparados para hacer las inversiones necesarias ahora, este año tendremos quizás 180.000 ó 160.000 casos y hasta 2.000 muertos", señaló con preocupación en las oficinas de la ONU en Nueva York.
Medrano admitió que la ONU y la comunidad internacional "desafortunadamente estuvieron muy poco enfocados en la respuesta" contra el cólera hasta ahora, y dijo que "éste no es solo un problema para Haití o la isla La Española, sino también para el resto y del mundo".
"En el pasado, en los 90, en América Latina tuvimos cólera. Empezó con un caso en un puerto en Perú y se expandió por toda la región: 18 países fueron afectados, un millón de personas infectadas y 10.000 muertos. Es algo que no queremos volver a tener", recordó.
"La región debe entender que es inaceptable tener este nivel de casos, que puede tener consecuencias devastadoras en el futuro en términos de salud, turismo, comercio", continuó.
"Esto no tiene nada que ver con el caso legal"
Medrano rechazó la visión de que el esfuerzo de la ONU por ocuparse de la epidemia es una suerte de "compensación" por su presunta responsabilidad en el brote, algo que a su entender no está probado.
"Para nosotros, como en muchas otras situaciones, nuestro papel es estar ahí. Esto no tiene nada que ver con el caso legal. Tenemos una crisis humanitaria de la que debemos ocuparnos. Ya tendremos tiempo para discutir las causas y aprender de esto", sostuvo.
Fuente: Globovision
0 comentarios:
Publicar un comentario