Por: Joel Suero
Como si Santo Domingo Oeste no tuviese hombres y mujeres que día a día contribuyen con el desarrollo del municipio y en beneficio de la juventud de esta comunidad, el alcalde Francis Peña y la Sala Capitular entregaron un reconocimiento como “Hijo Meritorio” al humorista Cuquín Victoria.
Reconocimiento por haber sido premiado como “El Gran Soberano 2014” por parte de ACROARTE, Soberano que respetamos.
Reconocer a Cuquín Victoria por el simple hecho de venir a dormir a su residencia en el municipio, es decirles a los de adentro que no vale la pena esforzarse.
A caso este municipio lleno de talentos que aportan más que Cuquín Victoria y que trabajan de primera mano con los más necesitados de esta localidad no merecen por encima de un hombre que apenas viene a dormir a su residencia en el residencial Alameda ser reconocidos y apoyados para seguir aportando a sus sectores en todo momento.
Para citar tres ejemplos de los tantos que tenemos en el municipio Oeste: Raúl Ulerio trabaja día tras día dando prácticas de baloncesto en el sector Buenos Aires, sin contar con una instalación deportiva de índole alguna y mucho menos el apoyo de la alcaldía o el Ministerio de Deportes.
También esta el caso de Rolando Matías, destacado dirigente deportivo del sector Las Caobas, con más de 15 años en este ejercicio en beneficio de los jóvenes caoberos, quien actualmente no cuenta con una cancha de baloncesto para impartir las prácticas ya que el ayuntamiento cedió el terreno donde se encontraba dicha instalación, para la construcción de un nuevo planten escolar.
Pero de igual modo tenemos al joven Andrés Travieso, quien dirige una fundación en beneficio de los más necesitados del municipio y que por ayuda de algunos amigos apenas puede pagar un local para las oficinas de la misma, mientras que día a día canaliza soluciones a quienes van a solicitar la ayuda de dicha organización sin fines de lucro.
La Sala Capitular no puede prestarse al juego de estar o no reconociendo a los que nunca han contribuido con el desarrollo o beneficio no solo de los jóvenes, sino del municipio en general. El deseo de buscar cámara o querer sonar de estar haciendo algo no se hace de la noche a la mañana y muchos con personas que tienen menos meritos que decenas que si realizan un trabajo por el municipio.
Ahora bien, si tanto el alcalde Francis Peña como la Sala Capitular, conocen de los aportes hechos por Cuquín Victoria en beneficio de Santo Domingo Oeste, que sean responsables y respetuosos de quienes aquí vivimos y Digan cuales son.
Este reconocimiento solo llama a pensar el porque la necesidad de la Sala Capitular y el alcalde Francis Peña de querer buscar cámara con tantas cosas que hacer en el municipio. Hasta cuando seguiremos en el mismo show, como si fuera el circo de la época romana.
Y como dijo el famoso escritor francés Albert Camus “La estupidez insiste siempre”.
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