Por Franklin Onésimo Tavárez Sánchez, M.A.M.
En Santo Domingo.-Tras la salida de Hipólito Mejía y Luis Abinader del Partido Revolucionario Dominicano y el triunfo de Miguel Vargas Maldonado sobre Guido Gómez Mazara, en una convención en la que turbas de ex -perredeístas de los grupos excluidos violentaron el proceso, desde esos litorales fue iniciada una campaña de ataques contra quienes decidimos quedarnos al lado del símbolo del jacho prendío y por supuesto del Ingeniero Miguel Vargas Maldonado, la cual no ha cesado hasta hoy.
Ha sido un arduo proceso en el cual tanto Vargas Maldonado como la militancia que sigue en SU CASA ha soportado con silencio, respeto y paciencia los embates rabiosos y desconsiderados de muchos que han generalizado, llegando incluso a PONERLES LA OTRA MEJILLA, como lo ha pautado el presidente y Candidato de esa organización, bajo el entendido de que en algún momento esos antiguos compañeros habrían de necesitarse si la oposición tenía reales intenciones de desplazar al P.L.D. del poder.
En la víspera todo parece indicar que más temprano de lo que se esperaba tanto Vargas como Abinader habrán de generar consenso para llevar boletas congresuales y municipales conjuntas, aunque en el nivel presidencial lo más prudente sea que ambos candidatos corran solos para mostrar sus fuerzas y potencialidades, pero ya el solo hecho de la posible suma de voluntades obliga a deponer actitudes por parte de verdaderos guerreros perremeístas que actúan descalificando y llegando a la ofensa personal y familiar.
Es que sin importar en qué punto se encuentren los disidentes, lo cierto es que los no oficialistas deben apuntar sus críticas y ataques contra el gobierno y el oficialismo, que es su verdadero obstáculo a vencer y cualquiera que actúe en otro norte lo hace consciente de que apuesta que se queden los que están, mostrando falta de visión e innecesaria beligerancia.
Digo esto, por cuanto quienes no han ofendido o no han respondido con igual nivel de intolerancia las ofensas, tienen el camino libre para imitar la Frase de Peña Gómez -YO LOS PERDONO-, pero los que insisten en el discurso incendiario, de SEGURO ANTES DE QUE TRANSCURRA ESTA QUINCENA recibirán instrucciones claras de BAJAR EL TONO Y APUNTAR sus cañones hacia el oficialismo y en caso contrario deben ser aplicadas sanciones ejemplares a los locuaces obscenos O EN SU DEFECTO PREPARAR PARA QUE EL P.L.D. GOBIERNO VEINTE AñOS MáS, a pesar de las diferencias en pro o en contra de la reelección…ESO ESCRíBANLO…
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